lunes, 16 de noviembre de 2015

Los músicos poetas

El día en el que se apagó tu risa la poesía llamó de nuevo a mi puerta. Tenía la cara del invierno colándose por debajo de las puertas y descompuso en un momento la rima en verso que era mi vida.

El momento me pilló bajo una lluvia sin paraguas, con el ukelele desafinado sonando a amargura. El apagón arrancó las cuerdas y me empeñé en comprar unas nuevas, pero volver a afinar el instrumento se antojó demasiado complicado para una persona que sabía de música lo mismo que sabía del amor: nada.

Todavía sigo buscando las notas perfectas para (re)componer tu risa, pero por el momento sigo en un mundo gris que se mata a diario, con el ukelele en la mano, desafinado.